Hoy 29 de junio, celebramos el Día del Maestro abnegado, de nuestros segundos padres, formadores de Actitud, Valores y Pensamientos, de aquellos que han nacido para dejar la semilla de la esperanza y desarrollo sin esperar riquezas a cambio, porque el mayor pago y orgullo para un Maestro es saber que aquel alumno al que un día educó, reprendió y aconsejó es un Profesional que pone en alto el nombre de nuestro País y contribuye al Desarrollo Humano del mismo. Gracias por brindarnos sus conocimientos, paciencia y entrega.
Saludo a todos los que a diario le dan sentido al significado de la Palabra Maestro, cuyas armas son las mejores para vencer la ignorancia -tizas, marcadores y pizarras-, a los que nos garantizan el Derecho a la Educación, más que por un salario por amor, especialmente a los que tuve la dicha de conocer y poder guardar de ellos lo mejor.
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