A principios de este año, me embarqué en nuevos proyectos laborales que pensé me permitirían un poco más de tiempo para el blog, pero resulta que los planes nunca salen como queremos y los proyectos cambiaron de rumbo y al final el más perjudicado es el blog porque no me ha quedado ni el mínimo tiempo para actualizarlo, pero trataré de dejar un hueco en la agenda porque es un proyecto que me llena mucha satisfacción.
Estos últimos meses han sido muy difíciles en el mundo entero, tragedias como el terremoto, posterior tsunami y emergencia nuclear en Japón, inundaciones en muchos países, en fin tantas cosas que nos recuerdan lo efímero que somos y que nos invitan a reflexionar sobre nuestros actos y a vivir el presente, pensando con reservas en el mañana. Sin embargo no debemos ver solo la parte negativa de nuestro alrededor, dice Silvio Rodríguez que lo más terrible lo aprendemos enseguida y lo hermoso nos cuesta la vida, y comparto su opinión, porque siempre nos enfrascamos a pensar en lo malo, por ejemplo la tragedia de Japón, ha demostrado el gran aprecio que tiene el mundo hacia este pueblo hermano y sin embargo los medios de comunicación no han resaltado este detalle.
Siempre, por muy fuerte y devastadora que sea la tormenta, el sol vuelve a brillar y lo hace con mas fuerza.
Cada día es hermoso, concentrémonos en esos detalles de la naturaleza, después de estar fuera de mi ciudad, de un lado a otro, casi por un mes –razones laborales–, fui de visita y el domingo realicé mi acostumbrada caminata hacia el Lago Cocibolca, la noche anterior había caído la primera lluvia de este invierno y el amanecer fue bellísimo, comparto estas imágenes:
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